CP-5

La bomba CP-5 es simple, liviana, muy compacta y económica. El hecho de que sea portátil la hace ideal para bombear resinas de poliuretano en aplicaciones de bajo volumen y alta presión. La CP-5 ceba rápidamente porque la válvula de retención de entrada está sumergida, y no en la parte superior, en donde dependería de la succión para el humedecimiento y sellado iniciales. Un ajuste de doble fulcro bombea 0,41 onzas por recorrido hasta 3000 psi, o 0,62 onzas por recorrido a 2000 psi. Un grifo de ventilación en la válvula de retención de escape libera la presión en la línea de dosificación para facilitar la desconexión del obturador. Las bolas dentro de las válvulas de retención de admisión y escape están hechas de cerámica: más liviana que el acero, pero más resistente. La bola de admisión de cerámica liviana requiere menos vacío para levantarla de su asiento, y también para mantenerla desactivada. Además, no se suelen encontrar sellos en las válvulas de retención. En cambio, los asientos de las válvulas están traslapados; los cuerpos de ambas válvulas se separan limpiamente en el centro para facilitar su limpieza. El bastidor está fabricado en acero inoxidable soldado. Otros componentes son: acero inoxidable libre de corrosión, latón y aluminio con recubrimiento duro. El respaldo del soporte gira para bloquearlo de modo que esté alineado con el bastidor. Las dimensiones de transporte/almacenamiento en general son 36" × 24" × 2 1/2", y solo pesa 27 libras. También incluye una manguera dispensadora de 15'.

La mayoría de los enjuagues de bomba suministrados por los fabricantes de poliuretano son una mezcla de solventes, lo que hace muy difícil encontrar sellos que lo soporten.  Por lo tanto, Lily recomienda limpiar la bomba CP-5 con xileno o xilol.  Coloque la válvula de admisión en una cubeta pequeña con solvente.  Bombee el solvente y el poliuretano dentro de la unidad hacia una cubeta de descarga hasta que salga el solvente.  Desvíe el flujo hacia la cubeta con solvente por un minuto, aproximadamente.  Deseche la mezcla de solvente y poliuretano en la cubeta.  Agregue solvente fresco en la cubeta y vuelva a recircular.  Esta segunda cubeta de solvente se puede usar para la limpieza inicial la próxima vez.  El solvente que quede en la manguera dispensadora puede provocar que se deteriore de forma prematura.  Se recomienda enjuagar el solvente con un enjuague final con fluido hidráulico o aceite de cocina.